La evolución de la tecnología ha permitido el aumento de la comunicación de las personas por medio de las redes sociales, el compartir información por estos medios no sólo permite que nuestros contactos conozcan algo que nos gusta, también genera información que es analizada y que se usa para entender mejor el comportamiento psicológico de los consumidores. Ésta información de aspecto emocional permite hoy más que nunca entender lo que motiva a comprar. Ahora es posible dirigir una campaña mucho más específica que lo que se podía hacer en el pasado y en la que sólo se basaba en datos geográficos o de edad de los consumidores.